14 julio, 2011

muerte

Muerte absolutista. Condimento distinguido de Lucifer. Calavera sombría con una trenza infinita. Andanza en contra de la vida. Muerte inmortal, un túnel, muerte perpetua.
Muerte asquerosa, impúdica, sedienta, pero jamás tendrás tu señorío (gracias Dylan). Jamás me aletargarás. Jamás serás jamás.
Unión perfecta. Hombre radiante y mujer inexorable, celosa y ermitaña.
Enemiga de Morfeo, aliada de Daimos y Fobos. Carnaval fúnebre, andante siniestro.
Remedio de desconsolados, venganza de gánster. Fiesta de disfraces, Hades y Perséfone comen granadas. Dionisios yace ebrio.
Perra muerte, muerte maldita, destructora de ilusiones. Tú sabes cómo herir.
Muerte amante de los 11 de septiembre, otoño infinito, destierro eterno, desenlace del destino.
Muerte recordada cada domingo, adornada con hermosas flores, acompañada de llantos y peticiones.
Muerte incapaz de aparecer en la vida, demonios que gangrenan las entrañas, sombra de las nueve y treinta.
Muerte por excelencia, muerte feliz, muerte añorada, muerte tranquilizante. Muerte amistosa, muerte súbita, muerte por último recurso. Muerte te miento.
Muerte silencio, muerte bruma, muerte insípida, muerte incolora. ¿Para qué sirves muerte?
Ronda de cuervos en el desierto, botella vacía para el alcohólico, año de sequía para el drogadicto.
Muerte eres muerte, eres punto muerto, punto aparte y punto final.

Fotos como fantasmas

Recuerdos como autoflagelos Atiendo a un niño, lo miro a los ojos Le sale una lágrima Mi niña interior me entierra las uñas  ¡Quiero ser un ...